Impacto arancelario, desplome en exportación de smartphones de China a EEUU
El panorama de las importaciones tecnológicas en Estados Unidos ha registrado un cambio drástico. En abril, los envíos del iPhone de Apple y otros smartphones ensamblados en China hacia territorio estadounidense se redujeron hasta alcanzar sus cifras más modestas desde 2011.
Este fenómeno pone en evidencia el severo impacto que la incertidumbre arancelaria ha provocado en el intercambio de bienes de alto valor entre las dos potencias económicas globales.
Caída abrupta de las exportaciones de móviles
Las cifras son impresionantes: las exportaciones de smartphones desde China hacia EE.UU. sufrieron un desplome del 72% el mes pasado, situándose apenas por debajo de los $700 millones de dólares.
Este descenso es notablemente más pronunciado que la caída general del 21% observada en el total de los envíos chinos a Estados Unidos durante el mismo periodo, según revelaron datos aduaneros detallados este martes.
La situación pone de relieve cómo la estrategia de aranceles impulsada por la administración Trump, que incluyó gravámenes de hasta el 145% sobre productos chinos, está reconfigurando las cadenas de suministro tecnológico a nivel mundial y fomentando la desviación de la producción de electrónicos hacia otros países.
Temor a una Guerra Comercial y repercusiones globales
En el ámbito financiero, crece la preocupación entre los inversionistas ante una posible guerra comercial a gran escala.
Un conflicto de esta naturaleza podría mermar significativamente el comercio bilateral entre Estados Unidos y China, que en 2024 alcanzó la cifra de $690 mil millones de dólares, con el potencial de devastar industrias enteras y encarecer los productos para el consumidor final.
Las tensiones bilaterales se mantienen en un punto álgido. Recientemente, Pekín acusó a la administración Trump de obstaculizar las conversaciones comerciales en Ginebra mediante la imposición de sanciones a los chips de inteligencia artificial de Huawei Technologies.
Es importante recordar que, el año pasado, los smartphones, las computadoras portátiles y las baterías de iones de litio fueron los tres principales productos que Estados Unidos importó desde China.
En contrapartida, el gas licuado de petróleo, el crudo, la soja, las turbinas de gas y la maquinaria para la fabricación de semiconductores figuraron entre las exportaciones estadounidenses más valiosas hacia el gigante asiático.
Reconfiguración de la producción: India como Alternativa Emergente
Un dato revelador es el notable incremento en el valor de las exportaciones de componentes de smartphones hacia India.
Este país, que alberga la mayor base de producción del iPhone fuera de China, ha visto cómo estas importaciones se cuadruplicaron aproximadamente en el transcurso del último año, de acuerdo con la Administración General de Aduanas de China.
Apple, por su parte, ha intensificado sus esfuerzos para trasladar una porción de su manufactura a India. No obstante, esta estrategia ha sido objeto de críticas por parte del presidente estadounidense, Donald Trump, quien recientemente instó a la compañía a relocalizar la producción del iPhone en suelo estadounidense.
Es pertinente señalar que este dispositivo nunca se ha fabricado en Estados Unidos, y la viabilidad de un proyecto de tal envergadura parece improbable a corto plazo.
Fuente: Sherwood