Importantes líderes de la industria tecnológica como Elon Musk, ex director ejecutivo de Twitter; Mark Zuckerberg, de Meta; y Bill Gates, cofundador de Microsoft, se unieron el miércoles pasado en una sesión a puerta cerrada en el Senado de Estados Unidos, donde coincidieron en la importancia de establecer regulaciones para la inteligencia artificial (IA).
Las personalidades más importantes de la escena
En esta reunión, que fue convocada por el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, también estuvieron presentes otros destacados directores ejecutivos, como Sam Altman de OpenAI, Sundar Pichai de Google y Satya Nadella de Microsoft, entre otros.
Schumer consultó a los empresarios sobre su disposición a regular la inteligencia artificial, y según declaró el propio senador a los medios tras la sesión, “todos ellos levantaron la mano, a pesar de sus diversas opiniones al respecto”.
El líder de los demócratas en el Senado convocó esta sesión informativa con el propósito de que los senadores puedan adquirir un mejor entendimiento acerca de los beneficios y desafíos asociados a la IA.
ChatGPT marcó un antes y un después
La inteligencia artificial alcanzó un hito significativo el año pasado con el lanzamiento de ChatGPT, una herramienta que tiene la capacidad de generar textos de manera casi indistinguible de un ser humano.
Schumer expresó su firme convicción de que el Congreso debe hacer un esfuerzo, por más complejo que sea, para abordar esta tecnología que avanza a pasos agigantados.
Tras la sesión en el Senado, Elon Musk, quien lidera empresas como X, SpaceX y Tesla, hizo hincapié en los riesgos potenciales que plantea la inteligencia artificial. En consecuencia, respaldó firmemente la necesidad de regularla y consideró que la reunión en el Senado marcó un momento de gran importancia para el futuro de la civilización humana.
Todos de acuerdo con la regulación de la IA
“Schumer nos solicitó levantar la mano para manifestar nuestro apoyo a la regulación de la inteligencia artificial, y creo que la mayoría de nosotros lo hicimos”, comentó.
Mientras tanto, Zuckerberg expresó a los senadores que “el Congreso debería colaborar con la inteligencia artificial en aras de la innovación y la implementación de garantías”.
“Esta es una tecnología emergente, por lo tanto, existen cuestiones que deben ser abordadas y, en última instancia, es responsabilidad de las autoridades hacerlo”, explicó, según una transcripción de sus declaraciones publicada por Meta.
A la sesión asistieron alrededor de 60 de los 100 senadores de la cámara, aunque hubo algunas críticas sobre la ausencia de medios de comunicación en la reunión.
Por lo tanto, estoy de acuerdo en que el Congreso debería trabajar en conjunto con la inteligencia artificial para respaldar la innovación y establecer salvaguardias necesarias. Dado que estamos tratando con una tecnología en pleno auge, existen cuestiones de gran relevancia que requieren un equilibrio cuidadoso.
“No comprendo por qué hemos convocado a los gigantes del monopolio mundial al Congreso para pedirles consejos sobre cómo aumentar sus ganancias y luego excluimos al público de la sesión”, criticó el republicano Josh Hawley.
Primeras medidas de seguridad
El presidente de Microsoft, Brad Smith, expresó el martes su respaldo a la propuesta de establecer una agencia independiente por parte del Gobierno de Estados Unidos para regular el uso de la inteligencia artificial.
Hace tan solo dos meses, las principales empresas tecnológicas del país acordaron implementar una serie de medidas de seguridad propuestas por la Casa Blanca. Estas medidas incluyen la realización de pruebas tanto internas como externas en sus sistemas de inteligencia artificial antes de su lanzamiento al público.
El Gobierno de Estados Unidos también anunció su compromiso de transformar los acuerdos voluntarios de las empresas estadounidenses en un marco internacional que regule el uso de la inteligencia artificial.
Necesaria una regulación a nivel mundial
Además, informó que ya ha mantenido conversaciones con países como Brasil, Canadá, Corea del Sur, Francia, Alemania, India, Israel, Japón, México y el Reino Unido en busca de colaboración en este sentido.
Hace tan solo dos meses, las principales empresas tecnológicas del país acordaron implementar una serie de medidas de seguridad propuestas por la Casa Blanca. Estas medidas incluyen la realización de pruebas tanto internas como externas en sus sistemas de inteligencia artificial antes de su lanzamiento al público.