Tesla demanda a adolescente por $2 millones de dólares por vender mercancía no oficial

En un inesperado giro de los acontecimientos, el gigante automotriz Tesla, liderado por Elon Musk, ha demandado a un adolescente británico de 14 años por la venta de productos no oficiales con el logotipo de la empresa.

Demanda millonaria contra un joven británico

Lo que comenzó como un proyecto personal de este joven emprendedor se ha convertido en una pesadilla legal que pone en tela de juicio los límites de la propiedad intelectual y la libertad de expresión en la era digital.

El caso ha generado gran controversia debido a un antiguo tuit del propio Elon Musk en el que parecía avalar este tipo de uso de la imagen de la marca.

La demanda, presentada en un tribunal estadounidense, acusa al adolescente, junto a otros individuos, de “competencia desleal” por comercializar productos no oficiales con la marca registrada de Tesla.

Entre los artículos mencionados se encuentran llaveros impresos en 3D, camisetas, sudaderas con capucha y gafas de sol.

Daños y perjuicios causados a Tesla

Tesla argumenta que estos productos no oficiales han causado un “daño irreparable” a su imagen y reputación, diluyendo el valor de su marca. La empresa exige el pago de 2 millones de dólares a cada uno de los acusados en concepto de daños y perjuicios.

Uno de los casos más llamativos es el de un adolescente que, según el diario británico The Sun, solo vendió una sudadera con capucha con el logotipo de Tesla en la plataforma Etsy, obteniendo una ganancia de apenas 3 libras esterlinas.

A pesar de esta mínima ganancia, el joven ahora enfrenta la posibilidad de tener que pagar una millonaria suma a Elon Musk.

Dear Elon,
I’m a game dev. and I am making a game about colonizing Mars with you and SpaceX in it. If you think it’s cool, all I need is the “Go ahead” to use your name and Logos.

I will post this every day for a year or until I get a Yes or a No!
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— Lyubomir Vladimirov (@lvladimirovBG) January 12, 2021

¿Doble moral de Elon Musk?

La ironía del caso radica en que el adolescente inició su negocio de productos de Tesla luego de leer el tuit de Musk en el que parecía aprobar este tipo de uso. El joven argumenta que actuó de buena fe y que no tenía intención de infringir los derechos de propiedad intelectual de la empresa.

Este caso ha generado un intenso debate en torno a los derechos de autor y la libertad de expresión en la era digital.

Muchos se preguntan si es justo que una empresa tan poderosa como Tesla pueda demandar a un joven emprendedor por una simple venta de productos no oficiales, especialmente cuando el propio CEO de la empresa pareció avalar este tipo de uso en el pasado.